Nuestros valores
alta costura
Presente en todo momento
Laura Monge es una de las pocas diseñadoras que quedan hoy en día, que singuen confeccionando los vestidos en su propio taller de alta costura. Donde ella, en todo momento puede supervisar desde el patronaje del vestido, la confección y finalmente el control de calidad.
Atención personalizada
A lo largo de su carrera profesional Laura ha concebido un método de trabajo que es un reflejo de su forma de entender el sector de la alta costura nupcial, como suele decir ella misma: «no podría ofrecer el mismo vestido a dos personas diferentes… Es imposible ofrecer a una mujer su propio vestido sin que haya existido un trato personal»
Alta Costura con corazón
El principal parámetro sobre el que se asienta su actividad es la atención personalizada y selecta que presta a cada cliente. Además de proporcionar unas creaciones que destacan por su diseño, calidad, buen corte y excelente confección: unos rasgos que le han permitido diferenciarse en el mercado frente a la fuerte competencia existente por parte del pret-á- porter, de las franquicias y de las grandes multinacionales. Su forma de trabajar combina la exquisitez y precision de la modistería tradicional, con una vision moderna y contemporánea a la vez que romántica y minimalista.
Proceso Creativo
Primeros pasos
En el primer encuentro Laura y la novia mantienen una charla sobre las necesidades, gustos e ideas para dar vida a un boceto. Una vez decidido, se pone en marcha la maquinaria: se busca que corte que más favorezca a la novia, un patrón que le estilice y realce su cuerpo. Finalmente, se elige la tela perfecta para el diseño que han elegido. Laura siempre busca trabajar con los mejores tejidos, cortes muy estudiados y depurados, como trabajaría un arquitecto al buscar las proporciones.
Según Laura expresa en sus propias palabras: «Cada cuerpo es diferente y depende de la proporción que le pongas puedes resaltar, realzar o acentuar.»
Patronaje y confección
«A la hora de hacer el vestido lo que más cuido siempre es la proporción. Que a la novia la haga la pierna mas larga, la cintura más entallada, un pecho proporcionado… cuido mucho eso. No todas las mujeres miden 1.80, entonces siempre estoy muy atenta las medidas y las proporciones al milímetro.»
El proceso de confección de cada vestido continua en el taller del atelier, en las manos de las mejores modistas y con la exhaustiva supervisión de Laura, en cada paso y cada detalle. Todo el equipo pone todo su buen saber hacer y los años de experiencia en cada creación.
Pruebas
La novia acude a cuatro pruebas antes de su gran día. Estas citas sirven para ir perfilando, perfeccionando y puliendo todas las sutilezas de su vestido de novia exclusivo y único.
En la última cita la mayoría de las novias acuden con el peinado y el maquillaje que van a lucir el día de su boda. Se les da una pequeña clase de protocolo y una explicación sobre cómo han de sentarse y colocarse en el coche y en la Iglesia. Este pequeño detalle diferencia a Laura Monge de otros diseñadores de vestidos de novia exclusivos en Madrid.
Para Laura lo más importante es que al final del trabajo la novia se sienta cómoda, preciosa y admirada. Especialmente tiene cuidado para que no se sienta disfrazada y que el novio cuando la vea en el altar diga: «Si, quiero».
A mí el que me digan «gracias Laura es justo lo que quería». Es lo que me hace seguir adelante seguir trabajando y seguir haciendo sueños realidad .
– Laura Monge